El último 14 de febrero Christopher Baker, de 28 años, fue a cenar a Borneo Bistro, un restaurante de Sunderland en Inglaterra que está muy bien rankeado por sus comensales.

El joven pidió la cuenta pero antes de pagar soltó una rata, que llevaba en su bolsillo, y salió del establecimiento aduciendo que no pagaría bajo esas bajas condiciones de higiene.

El gerente del restaurante le pidió disculpas  y no le cobró su comida de 7,25 libras esterlinas. Pero, finalmente, se descubrió la treta del Baker y ahora deberá enfrentar cargos en la justicia.

Kevin Smith, de 48 años, decidió llamar a un control de plagas. Pero cuando los fumigadores atraparon al roedor se dieron cuenta que era una rata domesticada, a la que inclusive la habían bañado poco antes de soltarla en el local.

Luego de que se difundiera el video, el joven  se declaró culpable y tuvo que compensar al restaurante con 60 libras más el costo de 7,25 libras de su consumo.

Algunas cosas solo funcionan en Hollywood.