En el 2013 el crimen de Ángeles Rawson fue tapa de todos los diarios, durante el transcurso de la causa hablaron abogados, amigos y familiares; pero faltaba una voz, la de la madre de la víctima, Jimena Aduriz quien nunca había dado una entrevista hasta el día de hoy.

En la actualidad el caso está cerrado y Jorge Mangeri, portero del edificio en donde vivía la víctima, fue condenado a cadena perpetua por ser considerado el autor material del crimen.

Jimena Aduriz manifestó: ¿Venganza? No, no es una palabra que esté dentro de mi vocabulario porque no es una emoción en mi corazón. Sí el odio, pero no conduce a nada. Contamina, entonces yo cuando tengo ira, odio, trato de que se me vaya y rezo para que se vaya.”

Luego entre lagrimas manifestó: “Me pasó de querer morirme para estar con ella. Esa sensación de que no la voy a ver más, esa sensación de proyecto frustrado, de la contracara de la realidad".

Además recordó que Angeles era "muy especial, muchos me dicen y yo me voy a terminar convenciendo de que fue un ángel con una misión".