El busto ubicado en la rotonda defensa sur de Concepción del Uruguay amaneció con la falta de un fragmento que fue arrancado de un golpe.


Se trata del tercer ataque que sufre la estatua desde que fue inaugurada en octubre de 2011.

La primera vez le pintaron los ojos y luego de limpiarla, en 2013, le hicieron inscripciones con pintura roja y robaron las placas de bronce.

Hasta el momento no hay pistas sobre los posibles agresores y se desconoce si en los tres casos se trató de los mismo(s) autor(es).