A pesar de los controles de alcoholemia los siniestros en las calles con conductores en estado de ebriedad se siguen sucediendo.

Muchas veces los protagonistas son jóvenes que toman sus autos después de una noche de diversión en boliches donde consumieron alcohol y se sienten en condiciones de manejar en ese estado.

Un ejemplo de esto ocurrió en Mar del Plata, donde un muchacho de 17 años se llevó por delante un poste de luz cuando el auto que conducía giró hacia el costado izquierdo sin que nada ni nadie haya intervenido en la maniobra para distraerlo.