Esta habitación inusual existe en los Alpes suizos, en el cantón de Grisons, al este del país. Cuenta con una cama doble, un par de lámparas y nada más que el cielo y las estrellas como techo. 

Es una "habitación" de hotel, sí, pero también la última obra de los hermanos y artistas conceptuales suizos Patrik y Frank Riklin. Dicha representación artística forma parte de su concepto de hoteles "Null Stern" ("cero estrellas" en alemán).

Los Riklin buscan jugar con la idea de lujo de los hospedajes tradicionales,que empezó en 2008, con la instalación de dormitorios en lugares inesperados, como una antigua planta nuclear en Suiza.

"La magia consiste en que es una fantasía real: la fantasía de estar en un lugar en el que no esperas que haya una cama doble", dijo Patrick Riklin.

Según el sitio Null Stern, el cuarto ya está reservado hasta el 31 de agosto y que ya hay una lista de espera para el verano de 2017.

¿Y si llueve? Si llueve, uno no puede ocupar la habitación y hay una casita a 50 metros en la que el huésped puede refugiarse.