Hebe siempre se enfrentó a los poderosos y por eso cosechó grandes amores pero también mucho odio. 

Nunca se calló lo que pensaba y a algunos les parecía agresiva y mal hablada pero esta señora que estuvo al frente de la Asociación Madres de Plaza de Mayo no pasó por esta vida inadvertida.

Hebe quería que sus cenizas fueran esparcidas en la misma plaza que la convirtió de una mujer normal en una luchadora sin precedentes y así será.

Este mismo jueves se realizará la ceremonia en la que se cumplirá con el deseo de la madre de las madres.

Las cenizas de Hebe se esparcirán en la Plaza de Mayo