Una multitudinaria marcha se realizó en San Miguel de Tucumán para exigir la aparición con vida de Daiana Garnica, la adolescente de 17 años que se encuentra desaparecida desde hace 10 días. El principal sospechoso se encuentra detenido e imputado por los delitos de privación ilegítima de la libertad seguida de homicidio.

Ramón Garnica, padre de la joven destacó que "hay un mundo solidario que me da fuerza a través del cariño de las personas y gracias a la tarea de los medios de prensa que siguen el caso y me permiten alzar la voz pidiendo justicia y reclamando a las autoridades para que nos cuiden, porque estos delincuentes están matando a nuestros seres queridos".

"Trato de ser fuerte y saco fuerzas desde donde no tengo porque quiero saber dónde está mi hija. Esta marcha no es política; sólo pedimos que agilicen la investigación", dijo.

"El jefe de Policía, el Comisario General Dante Bustamante, me dijo que lo mejor que podía hacer era buscarla yo porque sabía dónde iba y que hacía mi hija. Se equivoca porque mi hija no es lo que él piensa. Vamos por Daiana y muchas chicas que están detrás de ella como es el caso de Paulina Lebbos", agregó.

Si bien el fiscal Claudio Bonari ya caratuló la causa como privación ilegítima de la libertad seguida de homicidio, todavía no hay un rastro de Daiana más que intentar determinar si un arito hallado dentro del horno de la cortada de ladrillos donde trabajaba el principal sospechoso le pertenece a la víctima.

"Podría ser un arito de Daiana porque ella tenía un piercing arriba del labio, pero todavía no hemos podido confirmar si era de ella", explicó el abogado. El hallazgo de ese posible piercing se suma a los pequeños restos que levantaron los peritos de ese mismo horno, que podrían ser piezas dentales.

Daiana salió de su casa del barrio Julio Abraham, en Alderetes, el sábado 6 de mayo y le avisó a su madre, Susana Cisneros, que acompañaría a su vecino Suárez a comprar un regalo.

La joven no regresó y en su celular, que se había olvidado en su casa, hallaron una conversación con el principal sospechoso, quien le pedía que lo acompañe a comprar una sorpresa y que no le contara a nadie. A raíz de ese hecho, decidieron encarcelar a Suárez.