Quijano contó cómo su padre lo llevaba desde pequeño al centro La Perla, conocido también como la Universidad que fue el principal centro de clandestino de detención de la provincia de Córdoba.

Cayetano Quijano le permitía estar armado desde pequeño e incluso le hacía comentarios como "ahí es donde le dan máquina a los negros".

Para Luis fue complicado tomar dimensión de las acciones represivas de su padre y sus testimonio fue clave para comprender cómo funcionaba ese centro de detención clandestino y cómo realizaban secuestros.

Luis muchas cosas "no pudo contar" en el juicio ya que no podía declarar contra su padre y que él a sus "quince años fue una víctima no un victimario".