Los cuerpos de Ornella Steiner, de 51 años, y David Steiner, de 42, de Borgoña, Francia, fueron hallados sin vida la semana pasada frente a un sendero en el Monumento Nacional White Sands, un parque de desierto amplio y sin árboles, a más o menos 363 kilómetros en Albuquerque, Estados Unidos.

Su hijo fue encontrado deshidratado pero vivo junto al cuerpo de su padre: aunque los padres no llevaban suficiente agua para la excursión, ellos le dieron al niño más agua de la que ellos tomaron, según informó el alguacil del condado de Otero, Benny House.

"Los padres tomaban un sorbo y le daban dos", le dijo House a la cadena KVIA y ahondó: "Empezaron la caminata con dos botellas de agua de 20 onzas. Cuando llegamos, no había más agua en las botellas". El boletín informativo del parque aconseja que los excursionistas lleven 1 galón (casi 4 litros) de agua por persona.

La familia Steiner aparentemente viajó al parque de 712 kilómetros cuadrados el martes pasado, para admirar la mística belleza de las dunas blancas que parecen olas.

Las temperaturas superaron los los 37 grados ese día, algo que es normal para principios de agosto, dijo Marie Sauter, la superintendente del parque: "No hay sombra. No hay donde cubrirse. Estás afuera expuesto al sol, al viento, al calor, al reflejo del sol sobre la arena blanca. Es un fuerte ambiente desértico".

Se desviaron del camino

La familia partió más o menos al medio día de Alkali Flat Trail, un circuito cerrado de 7,4 kilómetros marcado solamente por postes clavados profundamente en la arena de yeso.

Después de caminar aproximadamente 1,6 kilómetros, se salieron del sendero y ya sea rodaron o se cayeron por la duna, dijo House. El alguacil dijo que no sabe si fue accidental o no.

Por lo que el niño le dijo a los investigadores, a la madre, quien no se sentía bien, le empeoró una lesión que había sufrido antes en la rodilla. Se dirigió de nuevo al punto de partida, pero solo logró caminar unos 91 metros antes de colapsar, dijo House.

Los empleados de servicio del parque que patrullaban el lugar encontraron a la madre muerta más o menos a las 17. Luego de revisar su cámara, el oficial vio fotos de un hombre y un niño en la entrada del parque y amplió la búsqueda.

Después de separarse de Ornella Steiner, David Steiner y su hijo aparentemente siguieron caminando otros 600 metros; seguían fuera del sendero y desconocían el colapso de la madre, dijo el alguacil. Entonces el padre colapsó.

Su lengua estaba inflamada y repetidamente le decía a su hijo que "el camión estaba justo ahí arriba", aunque habían caminado más de 1,6 kilómetros por el sendero, dijo el alguacil.

El chico fue trasladado a un hospital y se les notificó a los funcionarios consulares franceses, dijo House. Pero el niño no hablaba inglés, así que mientras tanto, la oficina del alguacil encontró una intérprete, la madre de la novia de un oficial, quien habla francés con fluidez.

Las muertes de los Steiner fueron la tercera y cuarta que ocurre en el parque en los últimos 10 años, informó la oficina del alguacil a KVIA, afiliada de CNN.

El alguacil dijo que piensa que los Steiner no estaban preparados para el calor y el sol con el que se encontraron: "Creo que subestimaron el desierto".

Memoria de la cámara

Los guardabosques hallaron primero el cuerpo de la madre, durante un patrullaje de rutina por el desierto de Nuevo México. Cuando miraron en la memoria de su cámara de fotografías vieron que la mujer estaba en compañía de otras dos personas, según explicó el policía.

Los guardabosque siguieron entonces sus huellas y encontraron el cuerpo del padre sin vida, y cerca del mismo a su hijo, quien estaba deshidratado pero consciente y fue llevado a un hospital local.

Ornella Steiner trabajaba desde hace una veintena de años en la Alcaldía de Reims. David Steiner dirigía una empresa de comunicación. La pareja amaba viajar y había visitado el sur de Estados Unidos durante diez días en 2014.

"Cuando volvieron querían regresar por más tiempo. Esta vez planeaban quedarse cinco semanas, era el viaje de sus sueños", contó a la AFP Kim Duntze, adjunta al alcalde de Reims.