La denuncia fue formulada ante la Fiscalía Nº 8 de Morón, luego que las autoridades administrativas de la Fundación 'Felices los Niños' habrían notado "faltantes" de mercaderías donadas y destinadas al Hogar 'Don Bosco', ubicado en la localidad bonaerense de Hurlingham.

Según se cree, eran desviadas al penal de Campana, donde Grassi, condenado a 15 años de prisión por abuso de menores que se encontraban en el mencionado hogar, que maneja la Fundación. Así, se habría permitido a Grassi gozar de prerrogativas gracias a la intermediación de las autoridades de de dicho penal.

Sobre el hecho, el abogado querellante Juan Pablo Gallego dijo: "No me sorprende. Cuando se habló de su perfil psiquiátrico veíamos un psicópata que disfruta dañando y delinquiendo. Ahora ha cometido desde la cárcel algún otro tipo de tropelía y es muy importante que se clarifique".

Según el abogado, el sacerdote "contaba con protección por parte de sectores del poder y es posible que lo siga obteniendo".