Una nena de tres años fue internada luego de ser golpeada y abusada por su madre, Cecilia (21) y su padrastro Sergio Algañaráz (30), quienes se encuentran detenidos. La pareja llevó a la menor al hospital argumentando que había sufrido un accidente doméstico pero los estudios confirmaron que tenía "múltiples signos de violencia física y sexual".

Apenas se supo el informe médico la fiscal Virginia Bravo imputó a la pareja por "lesiones graves calificadas por el vínculo y presunto abuso sexual", aunque evalúa agravar la carátula a "tentativa de homicidio".

Además Bravo confirmó que “esta madrugada se hicieron allanamientos en el domicilio donde vivían, en la localidad de Berisso", y ahora se continuará "con los análisis de las pruebas recolectadas”.

La niña presenta hematomas en todo el cuerpo, además de un cefalohematoma en el parietal derecho y parieto-occipital izquierdo, abdomen distendido, lesiones genitales, fractura de cúbito y radio de lado izquierdo en vías de consolidación y fractura ya consolidada en el brazo derecho. Además de fractura de las costillas de lado derecho, líquido abdominal y lesión en el riñón.

La menor que está internada en el Hospital Larraín, llegó de los brazos de sus padres afirmando que se había caído mientras comía. Después de ser atendida en la guardia se la derivó al Hospital de Niños Sor María Ludovica por la gravedad del cuadro clínico que presentaba y los directivos de ambos establecimientos realizaron la denuncia al detectar múltiples signos de violencia física y sexual.

Apenas la madre, de 21 años, llegó junto a su pareja al hospital de Berisso, la pequeña sufrió un paro cardiorrespiratorio que complicó su cuadro general, se la trasladó al Hospital de Niños y desde allí los médicos informaron que la niña había sido golpeada en forma brutal y que algunas de las heridas no eran recientes.

Pero la niña no está sola. Roxana, su abuela, aseguró que la Justicia estaba al tanto de que el padrastro era violento "pero no me hicieron caso", y sostuvo que se la sacaron "con mentiras" ya que ella tuvo la tenencia hasta hace poco tiempo. "Cuando la llevaron le dije que iba a una plaza, a jugar, y miren lo que le hicieron", sostuvo angustiada a la prensa.

La mujer además precisó que presentó la denuncia ante el juez de Familia, Hugo Rondina “acompañada de fotos de la nena golpeada y no hicieron nada; mi abogada me pedía más pruebas y yo le dije ‘ el cajón te voy a traer’. Y ahora mire dónde estamos”, lamentó.

“Los vecinos escuchaban que la encerraban en el baño y la golpeaban” contó y agregó que ante sus denuncias su hija contraatacó denunciándola a ella y logró una orden de restricción que le impedía mantener contacto con su nieta.

"Me destruyeron a la nena, esto no puede quedar así, quiero que venga el juez Rondina acá, que vea lo que le pasó a mi princesa”, reclamó la abuela.

El asistente social Luis Basualdo, encargado de los trámites ante la justicia de Familia, confirmó que tomó contacto con el caso cuando la abuela y el padre de Mía le pidieron que intervenga.