La Justicia consideró que el divulgar material íntimo de otra persona sin su consentimiento es un delito grave que merece una pena de prisión efectiva.

Patricio Pioli, el tatuador riojano que divulgo material de su expareja deberá cumplir condena tras las rejas lo que deja en claro la gravedad del delito.

Según contó Florencia, claramente compungida al recordar su propia experiencia, es un delito que se sigue cometiendo todos los días ya que es muy difícil frenar la viralización de ese tipo de material.