Alexandra Allen descubrió que estaba enferma cuando comenzó a picarle la piel después de bañarse en una pileta climatizada durante unas vacaciones. Ahora es tan alérgica que simplemente sudar la puede matar. Sufre urticaria acuagénica o alergia al agua, una enfermedad tan rara que solamente la tienen 35 personas en todo el mundo y que convirtió su vida en un infierno.

Los picores fueron sólo el principio. Después de hacer varias actividades acuáticas durante un viaje, sufrió una hemorragia interna, un fuerte dolor en las articulaciones e incapacidad para respirar. Fue al médico pero nadie sabía qué le pasaba. 

Al final, fue ella misma quién descubrió su extraña alergia después de leer sobre la urticaria acuagénica en un sitio de internet especializado. Después hacerle unas pruebas, su dermatóloga estuvo de acuerdo: su problema era el agua.

"Aprendí a evitarla", sostiene en declaraciones al periódico local de Utah, Deseret News. "Para mí recurrir a ella es emocionalmente agotador y físicamente doloroso".

Es alérgica al agua y transpirar puede llegar a matarla

Muy poco se sabe de la urticaria acuagénica, una enfermedad que algunos médicos atribuyen a una toxina producida por las glándulas sudoríparas al contacto con el H2O. Otros especialistas, sin embargo, creen que se debe a una sensibilidad extrema de su piel a algunos aditivos del agua, como el cloro.

"Sientes como si tu piel fuera un papel de lija muy delgado. Pica, pero no te puedes rascar porque sino se rompe y comienzas a sangrar", explica. La joven de 17 años creó una página web en la que desgrana los detalles de la enfermedad: http://alexandrallen.com.

Alexandra solo puede ducharse tres veces por semana y no hay ningún tratamiento para su enfermedad. Sus duchas son cortas y con agua fría. Tiene que evitar la lluvia y estar siempre en lugares refrigerados, porque hasta transpirar es peligroso para ella y puede causarle un shock anafiláctico e incluso, la muerte.