Crece la preocupación en distintas zonas de Paraguay, Uruguay y Argentina por las intensas inundaciones que ya generaron decenas de miles de evacuados, además de cuatro muertes en Asunción, debido a un fuerte temporal de viento y lluvia que ha azotado a Asunción.

En Paraguay son 90 mil las personas que han tenido que abandonar sus hogares, siendo la región más afectada hasta el momento; mientras que en Uruguay, los departamentos más comprometidos han sido los de Artigas, Paysandú, Rivera y Salto, con alrededor de 5.500 personas desplazadas.

Por su parte, la zona más afectada en Argentina es la noreste, por donde pasan los ríos Paraná, Uruguay y Paraguay, que han manifestado crecidas históricas en sus caudales. Hay 20 mil evacuados, y barrios enteros anegados.

Al respecto, el secretario de Desarrollo Humano de Concordia, Guillermo Echenause, afirmó este viernes que la situación podría agravarse si "el agua llega a superar los 17 metros por sobre el terraplén, que cubre 16 metros”.

"Los pronósticos meteorológicos indican que el agua sí podría superar la marca de los 17 metros", sostuvo el funcionario, y especificó que en ese caso serían 20.000 personas las que deberán ser evacuadas de esta ciudad, que resultó la más afectada, las cuales se sumarían a las "8.000 que ya han sido trasladadas a refugios, escuelas, gimnasios, casas de familias y amigos".

En tanto, en el puerto de la localidad chaqueña de Barranqueras, el río Paraná se ubicó a una altura de 7,53 metros, 28 centímetros más que la marca registrada hace 24 horas, lo que complica aún más la situación de las 1.450 familias evacuadas.

A la crecida de esos ríos se suma la del Paraguay, en particular en el acceso a Puerto Pilcomayo, en Formosa, donde la situación continúa siendo crítica para los pobladores ribereños “a pesar de que en las últimas horas” el cauce “se estacionó” y “cesaron las lluvias”, según explicó el intendente de Clorinda, Manuel Celauro, citado por la agencia Télam.

Unas 3.000 personas de ese sector y de barrios cercanos al control fronterizo de “San Ignacio de Loyola” son asistidas por el gobierno provincial “desde hace varias semanas”, comentó el ministro de la Comunidad, Aníbal Gómez.

Por su parte, la provincia de Corrientes registra un nuevo pulso ascendente en la crecida del río Paraná, por lo que más de 300 familias permanecen evacuadas, mientras seis localidades están en etapa de evacuación y una en alerta.