Mientras 678 continúa con sus relevamientos cuidando el bolsillo de la gente, el debate en el programa giró en torno a la protección que ejercen algunos medios y corporaciones para con los supermercados que se encargan de formar los precios, que perjudican a los consumidores.

En este sentido, el periodista y editor de Economía del diario Tiempo Argentino, Mariano Beristain, se sumó a la mesa para debatir y explicar algunos conceptos sobre la iniciativa del Gobierno para cuidar los precios, y la operación de algunos medios a favor de los supermercados.

“Hacer futurismo en economía es un mecanismo que se utiliza para engañar a la gente”, resaltó Beristain, quien sostuvo que se trata de un mecanismo “para manipular a la gente”, y ejemplificó: “Si yo tengo interés en que el dólar se dispare, voy a decir que el dólar va a estar a $20”.

De la misma manera, el editor de Tiempo Argentino afirmó que hubo “periodistas y economistas que instalaban el dólar en un precio muy alto”, explicando que esta especulación tiene “una intencionalidad política”, y sostuvo: “Tratar que la gente vaya a comprar dólares, para que se produzca el efecto que ellos plantean, que el dólar se vaya por las nubes”.

“Lo primero que tiene que hacer el Gobierno es profundizar la política de los Precios Cuidados, extender la canasta”, subrayó el periodista, y agregó: “También lo que hace 678 de controlar que se cumplan los precios, lo tienen que hacer el Gobierno, con más detalle”.

Del mismo modo, Beristain cargó contra los supermercados y expuso una experiencia personal. El periodista contó que estuvo en el Mercado Central, donde consiguió un salamín a 75 pesos  el kilo, mientras que en un supermercado grande lo encuentra por 207 pesos. Además, indicó que el costo de este embutido es de 55 o 60 pesos el kilo.

“Cuando hablamos de los formadores de precio, estamos hablando de esto, que les meten la mano en los bolsillos a la gente”, disparó Beristain, y continuó: “Porque hay un doble abuso, con el consumidor, a través del enorme margen de precios, y con las pequeñas y medianas empresas, que negocian de formas adversas con los supermercados”.

Por último, el periodista pidió por más “mecanismos regulatorios desde el Estado, y mecanismos que desconcentre el negocio de los alimentos”, pidió por la apertura de “mercaditos centrales por todos lados”,  y por “políticas dirigidas a desconcentrar la economía”, y destacó la importancia del “cuidado del nivel de empleo”.