A poco menos de un año de las elecciones presidenciales de 2015, un informe de Televisión Registrada muestra cómo operan los medios para instalar un panorama desalentador que favorece a los candidatos de la oposición.

En el segmento se observa con claridad que el monopolio Clarín crea un discurso unidireccional, que reproduce en todos sus programas e instala como hegemónico.

Al mismo tiempo apunta contra quienes no repiten sus slogans y desacredita las voces disidentes por "kirchneristas", y a los programas y periodistas que defienden las acciones del gobierno por "mercenarios".