A pesar del vergonzoso estado de los subterráneos de la Ciudad de Buenos Aires que se inundan cada vez que llueve, que no cumplen con los horarios programados, que si siquiera las escaleras mecánicas funcionan como debieran, tanto que tuvo que intervenir la justicia, el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires tenía previsto subir el precio del viaje de 19 a 21 pesos a partir del 2 de mayo.

Pero al parecer el jefe de Gobierno de la Ciudad escucho el mensaje presidencial y decidió suspender ese aumento al menos hasta saber el resultado de las elecciones.

Esta es, claro, una medida más que extorsiva ya que si ellos ganan mantienen el poder de modificar la tarifa como quieran y en el caso de que pierdan le pasarían el problema al próximo gobierno.