Ojalá que el diputado porteño de la Coalición Cívica Sergio Abrevaya nunca necesite un baño estando en la vía pública ya que fe él quien presentó un proyecto para modificar la ley vigente que obliga a bares y restaurantes a habilitar los sanitarios a las personas que lo soliciten, sean o no clientes. El proyecto del diputado prevee que los establecimientos puedan cobrar un monto para alquilar ese servicio.

La iniciativa presentada por el diputado permite que esos locales cobren por el uso de los baños un monto equivalente al valor de 1/2 unidad fija -unos 10 pesos- como máximo por persona y precisa que, por ello, "las instalaciones sanitarias deberán contar con productos de higiene como contraprestación a ese pago, como jabón, papel higiénico, secamanos, y deberán de estar en buenas condiciones de limpieza y uso". Lo que hoy están obligados a brindar sin costo alguno.

En rigor, en la Ciudad está vigente una ordenanza de 1993, sancionada por el entonces Concejo Deliberante, que ordenó "al Departamento Ejecutivo que exija a los propietarios de confiterías, bares, restaurantes y salones de té para que liberen el uso de las instalaciones sanitarias para toda aquella persona que así lo solicite, haya o no efectuado consumición".

Pese a la norma, son muchos los restaurantes y bares porteños que no permiten el acceso a los sanitarios y colocan en su entrada carteles con la leyenda "los baños son de uso exclusivo de los clientes", pero en lugar de obligar a esos establecimientos a cumplir con la ley el diputado de Lilita pretende que la gente pague.