No pasaron muchos días desde aquel escándalo por sobreprecios en la compra de barbijos por parte del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, y ahora trascendió uno nuevo: la gestión de Horacio Rodríguez Larreta pagó 170 millones de pesos por tapabocas que nunca recibió.

De acuerdo con Infobae, la empresa E-ZAY, dedicada al rubro informático, le vendió (a través de una compra directa) 5 millones de máscaras por $340 millones y cobró el 50% de esa operación por adelantado, es decir $170 millones, pero hasta el día de la fecha solo entregó 150 mil.

La compra se hizo a una empresa intermediaria que no fabrica los barbijos y ni siquiera tiene página web. En la documentación que le entregó a la Ciudad figuran dos teléfonos que nadie atiende y una dirección en Puerto Madero que no aparece en los registros comerciales; además la firma se fundó en 2015, dedicada a la comercialización, distribución, importación y exportación de equipos de informáticas, y recién en febrero de este año se inscribió a la AFIP para vender instrumental médico, odontológico y artículos ortopédicos.

Curiosamente la resolución de la compra lleva la firma de Nicolás Montovio, el exsubsecretario de Administración del Ministerio de Salud, quien tuvo que renunciar a mediados de abril por la compra de barbijos N95 a la empresa Green Salud, que estaban vencidos y que se investiga si fueron adquiridos con sobreprecios.

En este caso se trata de barbijos de la marca DIMEX, adquiridos por 68 pesos cada uno y que según la descripción del gobierno porteño son de un solo uso, plegado, tricapa, con tiras, confeccionado con dos capas externas de tela no tejida de polipolipreno y una interna de material filtrante a un amplio espectro de olores, con una capacidad de filtración superior al 85 por ciento.

El Observatorio del Derecho a la Ciudad había denunciado que la empresa fabricante de esos mismos barbijos, CINMOR SRL, le vendió a la Ciudad en forma directa a la mitad de precio. Según esa organización que monitorea los números públicos, el sobreprecio trepaba a los $207 millones, solo en dos operaciones de barbijos.