Incluso desde de ser electo, desde el macrismo lanzaron una ofensiva hacia los distintos funcionarios que continúan sus mandatos, independientemente del cambio de gobierno, ignorando, incluso, los tiempos establecidos por la ley para dichos cargos.

Uno de los mandatos que pretende interrumpir el presidente electo Mauricio Macri es el de la Procuradora General de la Nación, Alejandra Gils Carbó, a quien acusa de ser “militante de kirchnerismo” y no un “funcionario técnico”.

Sin embargo, como muestra el informe de 678, el PRO suele designar militantes y diputados propios para distintos cargos públicos. “Haz lo que yo digo, y no lo que yo hago”.