A Mauricio Macri nada lo detiene. Ni las acusaciones en su contra, ni la pérdida de peso dentro de su propio espacio, ni las denuncias internacionales. Él sigue firme en sus argumentaciones y ni siquiera llama Golpe de Estado al perpetrado contra Evo Morales -a quien acusó de querer cometer fraude- que fue condenado por todas las organizaciones latinoamericanas.

Para dar su defensa siempre se apoya en los medios que le son funcionales, y Radio Mitre, del Grupo Clarín, es una de sus plataformas favoritas para que sus seguidores se convenzan de sus argumentaciones.

Para cerrar dijo que la denuncia del ejército boliviano era falsa, lo que ya fue desmentido, y que todo era una mezcla de malicia y alucinaciones, una exacta definición para su propia defensa.