Minutos después de las 12, la Cámara de Diputados de la Nación dio inicio a la sesión en la que se espera aprobar la Ley de Pago Soberano enviada por el poder Ejecutivo. Una ley que propone  cambiar el lugar de pago de los bonos reestructurados en 2005 y 2010, crear una comisión bicameral de seguimiento de la deuda y cambiar al Bank of New York (BONY) como agente fiduciario.

La sesión que  cuenta con el quorúm otorgado por el oficialismo y aliados, como Eduardo Santín que ya confirmó que votará a favor de la ley, debatirán todo el día y se espera que recién en la madrugada del jueves quede aprobada.

El debate comenzó de manera interrumpida, cuando se iba a debatir el proyecto para autorizar a las  fuerzas armadas a que continúen formando parte de la misión de estabilización de la Organización de Naciones Unidas (ONU) en Haití. Fue cuando desde las tribunas lanzaron insultos afiliados del SMATA  al diputado del Frente de Izquierda, Nicolás del Caño, que participa activamente de la protesta que mantienen los trabajadores despedidos de Lear.

Por su parte, el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, cuestionó a los miembros de la oposición que adelantaron que votarán en contra: “Piensan que si al Gobierno le va mal a ellos le va a ir mejor, pero a la patria toda le va mal si se genera una deuda de 500 mil millones de dolares, el equivalente al total del PBI”.

“El problema central de la Argentina es que el endeudamiento ha producido hambre, desocupación y desindustrialización. Los últimos diez años han confirmado que hay otro camino", agregó el lesgislador oficialista.

Además, el diputado nacional y presidente de la comisión de Presupuesto de la cámara baja, Roberto Feletti, aseguró que el proyecto "apunta a defender la autonomía del Estado" y destacó la necesidad de que haya "un voto masivo" a la ley para "preservar el proceso de reestructuración de la deuda realizado en el 2005 y 2010".

Entre la oposición Elisa Carrió aseguró que  presentará un texto en el que acusa al Gobierno de no tener "una estrategia judicial con respecto a los tenedores de bonos no reestructurados" y "El Gobierno simplemente se limitó a negar su deuda y a manifestar que nunca les pagaría lo que reclamaban". Además aseguró: "El Gobierno está colocando a nuestro país en una situación de extrema gravedad institucional".

El Frente para la Victoria tiene garantizado el número para sancionar la ley con votos propios y de aliados. La UCR, el Frente Renovador, el FAP, Unión PRO, Unidad Popular, la Coalición Cívica y el Frente de Izquierda anticiparon su rechazo al proyecto oficial a través de siete dictámenes alternativos. Aunque ya es sabido que  ninguno está en condiciones de superar a la mayoría kirchnerista.