En septiembre de 2022, hace casi un año ya, el ilustrador uruguayo Sebastián Santana encontró en el aeropuerto internacional Ángel S. Adami de Montevideo, un avión que sirvió de transporte personal para el dictador de nuestro país Emilio Nicolás Massera y formó parte del Plan Cóndor, para trasladar detenidos. 

Santana investigaba la desaparición de cinco militantes de izquierda para realizar una ilustración del caso. Se trataba de los uruguayos Gustavo Insaurralde y Néstor Santana, y los argentinos José Antonio Logoluso, Dora Marta Landi y José Luis Nella, detenidos en Paraguay y que según figura en distintos registros -entre ellos en el llamado Archivo del Terror de Paraguay-, y que fueron trasladado en “un avión bi-reactor de la Armada Argentina con matricula 5-7-30-0653”. 

Tras declarar el pasado 15 de junio ante el juez Casanello, que lleva adelante las causas del Plan Cóndor en nuestro país, la nave fue identificada en Uruguay gracias a datos de la página de Facebook de la Armada argentina y de blogs de aficionados a la aviación. Allí, se constató que el avión había servido para uso personal del exalmirante Emilio Nicolás Massera, uno de los jerarcas de la última dictadura argentina de 1976 a 1978. 

Santana contó cómo localizó el avión, vía google maps y confesó que pensó que los investigadores ya sabían de la existencia de la herramienta al servicio del terror que escondieron los militares. Pero no. Así lo contó en esta nota con Darío Klein de CNN en Español.