“Su psiquiatra de cabecera dijo claramente que dentro de dentro de un cuadro depresivo hubo un detonante y fue el temor a perder el trabajo como contratada del Ministerio de Salud de la Nación con 17 años de antigüedad”, contó la madre de Ana Clara en una sentida carta en la que cuenta las razones por las que se quitó la vida.

Desesperada ante la situación de incertidumbre laboral que provoca esta gobierno en los trabajadores estatales, la mujer tomó la decisión tan dolorosa. La última de todas.

Su madre contó que Ana Clara “empezó a sentir la obsesión de la pérdida laboral, la indefensión que eso le provocaría y la carga que representaría para los padres”. 

“Ella amaba la vida. La reacción de sus amigos así lo muestra. Pero la sociedad la pudo y esta sociedad semidestrozada por la idea del individualismo no la sostuvo”, contó. 

La carta la dio a conocer la psicóloga Laura Cittadini en las redes sociales, donde contó que la mujer pide que se difunda para dar a conocer la historia de Ana Clara, con la intención de que estas historias no se repitan, que haya un freno al desahucio. 

X de Laura Cittadini

La carta completa

Palabras

Ana Clara se fue. Por decisión propia. Su alma estaba quebrada, su psiquis estaba frágil. No le alcanzaron ni la medicación de los profesionales, ni nuestros cuidados, ni nuestro acompañamiento, ni nuestro amor, ni el de sus amigos. Su joven vida había estado atravesada por algunos episodios que pudo superar, pero esta vez fue distinto, definitivo y como madre, observadora de la vida, la sociedad y el mundo, como militante de la solidaridad y la justicia siento la obligación de decir que Ani, dentro de su cuadro, cayó en uno de los agujeros que está haciendo irremediablemente esta red perversa del ‘sálvese quién pueda de la destrucción’. Su psiquiatra de cabecera dijo claramente que dentro de dentro de un cuadro depresivo hubo un detonante y fue el temor a perder el trabajo como contratada del Ministerio de Salud de la Nación con 17 años de antigüedad. Ella era psicóloga. Empezó a sentir la obsesión de la pérdida laboral, la indefensión que eso le provocaría y la carga que representaría para los padres. Sintió que la red solidaria de la sociedad se había roto y que ya no la contenía. Por eso repito que se cayó por uno de esos agujeros. También siento la necesidad de decir que no solo habrá más agujeros sino que hay muchos seres anónimos que cayeron y caerán. 

Ella amaba la vida. La reacción de sus amigos así lo muestra. Pero la sociedad la pudo y esta sociedad semidestrozada por la idea del individualismo no la sostuvo. 

Por tanto amor que nos dio voy a aplicar la consigna de la lucha por la vida, 

Anca Clara… presente ahora y siempre. 

Tu mamá.