Baby Etchecopar ya había contado públicamente que Horacio Rodríguez Larreta, en persona, le había ofrecido "una pauta".

Después el Jefe de Gobierno porteño no quiso salir al aire y Baby lo amenazó con empezar a hablar de los negociados mientras la decía que tenía la obligación de hablar con él.

Pero con Larreta en el piso Baby Etchecopar se comió los mocos y no sólo lo trató como si fuera un estadista sino que se desdijo de todas las críticas que viene haciendo hacia la Ciudad y su seguridad diciendo todo lo contrario de lo que viene comunicando.

Para cerrar Larreta se comprometió a volver al programa de Baby, tal vez asustado de que el operador empiece a ventilar algunos asuntos.