A Martín Tetaz le pasa lo que a muchos: les gusta la controversia, ser picante en sus respuestas, pero no soportan las críticas. Estuvo invitado en la Mesa de Mirtha Legrand que ahora regentea su nieta con menos gracia pero el mismo antiperonismo, y se refirió al tema.

Claro que recibió el contragolpe inesperado de Débora Plager quien lo ubicó al bajarle el precio a las discusiones en Twitter y los memes sobre cualquier opinión, que Tetaz increíblemente comparó con la violencia política en el país en los años setenta.