Para los medios hegemónicos todo vale. Se puede decir casi cualquier cosa sin necesidad de tenga un correlato con la realidad o que alguien lo corrobore. Basta decirlo y ya está, queda grabado en el inconsciente de sus irritados televidentes.

Por eso se aprovechan y se relajan. Ya ni necesitan esforzarse demasiado por hacer creíbles las denuncias que hacen sobre las figuras del oficialismo, especialmente Cristina, porque lo a lo único que apuntan es a irritar a su público.

Baby Etchecopar es un abanderado de este estilo y eso le abre el juego para que deje caer una versión -que supuestamente le dijo el peletero de Cristina frente al Hotel Alvear- donde no solo ella aparece exigiendo letras de oro sino que ni siquiera se preocupa por dejar dinero sino "cheques de la Televisión Pública".