El último movimiento de la Justicia corporativa fue la utilización del atentado de AMIA para atacar al Gobierno, a través de una insólita acusación contra la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, efectuada por el fiscal federal Alberto Nisman.

En medio del repudio generalizado que obtuvo esta denuncia por parte de los familiares de las víctimas del ataque a la mutual israelita, Gerardo Beer, referente Asociación 18J – Familiares y Amigos de las Víctimas del atentado a la AMIA, visitó 678 donde expresó su “consternación al ver las ridiculeces que adujo el fiscal Nisman respecto a la Presidenta”.

“Tanto Cristina como Néstor Kirchner se abocaron siempre a defender la causa de la AMIA, a instar a la gente de Irán que se ponga al servicio de la Justicia argentina”, recordó el invitado del programa de la TV Pública, al tiempo que, del mismo modo, insistió: “Esta acusación que se le hace a la Presidenta es inaudita”.

El referente de Asociación 18J, manifestó que esta maniobra de Nisman “hirió los sentimientos de todos”, y sobre la acusación del fiscal y la deshonra a las víctimas, sostuvo: “Yo tenía una furia, porque nos sentimos traicionados por la Justicia; este hombre nos traicionó, porque nos tuvo dos o tres años atrás como bola sin manija, diciendo mentiras y más mentiras”.

“Según él, tenía 500 fojas para presentar contra los iraníes, pero no aparecieron nunca, y entonces, lo que nosotros sabemos ahora es que no investigó nada, y para lavar la ropa sucia, dice que ahora tiene 300 fojas donde expone por qué la Presidenta nos ‘traicionó’”, precisó Beer, y agregó: “Para nosotros, lo que está buscando es apartarse de la causa, pero queremos que Nisman pruebe todo lo que dijo, que muestre todas las pruebas de lo que investigó”.

Por otro lado, el invitado de 678 recordó: “En marzo del 2013, Timerman se acercó a la AMIA a avisar que iba a haber un acuerdo con Irán y todos estábamos de acuerdo, porque vimos una lucecita al final del camino, y vimos que había algo esencial, que no ocurrió, que no se caían las alertas rojas, ni pasaba nada con la causa”.

“En el 2013 yo dije que el que busca rédito político con el mayor atentado que sufrió Argentina está por el camino equivocado”, remarcó Beer, y reflexionó: “Lo que pensamos nosotros es que, tal vez, Clarín se quedó sin tapas, y quiso empezar con algo nuevo; es raro pensar que en un mes de feria y que en un año electoral, de repente aparezca esto”.