La llegada de La Libertad Avanza al poder trastocó todos los códigos de la política imperantes hasta el momento. Y lo hizo de la peor manera, insultando, faltando el respeto, cortando micrófonos, amenazando con ‘cárcel o bala’ y proponiendo gobernar sin Congreso.

Bertie Benegas Lynch mostró un poco más de ese menú al mostrarse como un ajeno horrorizado por lo que veían a su alrededor y llamando impresentables a sus colegas.