Humberto estaba llegando tarde a su casa porque el servicio se había visto interrumpido por una protesta de extrabajadores.

Viviana Canosa mandó entonces un móvil para reflejar la "indignación" de la gente pero se encontró con que no toda la gente piensa como ella y le sigue el juego.

Primero fue cuando dio por descontado que el servicio habitual del Roca era pésimo pero Humberto le contestó que habitualmente el servicio era espectacular.

Y para cerrar quiso una reflexión sobre lo que pasaba en el país que no se respetaba la distancia social. Y Humberto le dio otra lección al explicarle que hay que vivir en una burbuja para pensar que sucede solamente acá.

Y cerró con una conclusión lapidaria al asegurar que lo que hacía Canosa era "mentirle a la gente".