María Laura Garrigós de Rébori, presidenta de la Cámara Nacional de Casación en lo Criminal y Correccional de la Capital y titular de Justicia Legítima, se refirió a la marcha opositora convocada por un grupo de fiscales para el 18 de febrero.

Para la camarista, se trata de "una bravuconada" en la que "no hay ninguna discusión en juego: esto es una manifestación simplemente política. Me parece bien que tengan expresiones políticas, lo que no me parece bien es que la expresión política encubra otras cosas”.

En una entrevista con el diario Página 12, Garrigós de Rébori sostuvo que si los fiscales convocantes "creen que hay algo que los ataca y quieren oponerse o se sienten presionados de alguna manera, ellos son los destinados a investigarlo", al tiempo que "están obligados a hacer la denuncia de las supuestas presiones" y "son los responsables de transparentar y hacer las cosas lo más claras posible".

Los convocantes "no son los angelitos", dijo la titular de Justicia Legítima al recordar que muchos de los fiscales fueron denunciados por organismos querellantes en el caso por el atentado a la AMIA. "Están cuestionados por sus formas de trabajo", dijo.

Además, subrayó que lo que "está claro es que se han opuesto a la apertura del proceso inquisitivo", de acuerdo a la reforma del sistema judicial impulsada desde el Ejecutivo, porque "junto con buena parte de los jueces federales y algunos de instrucción, siempre han considerado que perdían poder".

Sobre la verdadera búsqueda de la marcha del 18 de febrero, Garrigós de Rébori indicó: "Creo que muchos están disconformes. La corporación está sufriendo que no va a poder seguir teniendo el status quo y entonces se mueven como estertores de los que no quieren el cambio. Están tratando de evitar las modificaciones que están en proyecto y podrían ponerse en marcha".