A poco más de un mes de la elección presidencial, la oposición se juega todo para lograr revertir una diferencia a favor de Daniel Scioli (FpV), que a priori parece imposible.  En ese marco vale la pena preguntarse qué hay detrás de los incidentes por los que se suspendió el partido de Godoy Cruz-Racing, en Mendoza.

Allí, una veintena de violentos comenzaron a arrojar piedras al campo de juego con clara intención de evitar que el partido continúe. Si bien el conjunto local iba perdiendo (1-0 con gol de Milito de Penal), la sensación de que hubo una reacción premeditada y desmedida con lo que acontece a la actualidad deportiva del club, instala dudas sobre los responsables de semejante hecho.

Lo llamativo es que los hechos de desmedida pero puntualizada violencia se produzcan a poco tiempo de conocerse la noticia de que el gobernador de Buenos Aires y candidato a presidente del Frente para la Victoria, Daniel Scioli, haya analizado la vuelta del público visitante a los estadios de fútbol.

El periodista Héctor Gallo contó este lunes en el programa de Mariano Closs en CN23 que, según una fuente propia, la barra brava de Godoy Cruz "responde al gobernador (electo) (Alfredo) Cornejo que es hombre de (Mauricio) Macri"

Cornejo ganó las elecciones de la gobernación de Mendoza y en su momento aseguró que es "aliado del PRO", el partido que conduce el jefe de Gobierno porteño y candidato a presidente de Cambiemos.

"¿Qué se siembra con esto? ¿No se puede hacer que jueguen los locales querés que jueguen los visitantes?", explicó el periodista.

"Es mucha casualidad que tiran diez piedrazos y termina el partido cuando el día anterior habían anunciado (la vuelta de los visitantes) y nadie hace nada para sacarlos", contó Gallo.

Los medios también juegan su papel en la politización de la suspensión en Mendoza. El diario Clarín puso este lunes en tapa la noticia y le dio una trascendencia que no tuvo en el resto de los matutinos. De hecho, la tapa aparejara esta información con la insistencia de la oposición en "votar otra vez". De esta manera, violencia deportiva y fraude electoral, se equiparan de una manera que obliga todavía más a hacer foco en quiénes son y a quién responden los autores de las agresiones en Godoy Cruz.