En medio de un almuerzo, y totalmente fascinado por la geografía cordillera de la provincia de Mendoza, Hermeto Pascoal compuso -sobre una servilleta de tela y con un fibrón- una canción especialmente dedicada a los mendocinos.

Ese acto de amor no fue correspondido de la misma manera, sino como era esperable, con un interés económico.

El brasileño había sido invitado junto a su esposa por el director de Cultura de la ciudad Diego Gareca, quien obviamente puso a cuenta de la municipalidad el gasto: aquel ticket señaló un costo de 200 pesos por la servilleta escrita.

Hermeto Pascoal estuvo por Mendoza para presentarse en la séptima edición del San Vicente Jazz, como uno de los referentes de la cultura latinoamericana a nivel mundial, a los 78 años de edad.

Intitulada por él mismo “Viva Mendoza y su pueblo (Viva Mendoza e seu povo)”, la servilleta es la prueba fehaciente de la humildad y generosidad del multi instrumentista.