Amanda Amazon es una modelo de 38 años, de gran contextura física: mide 1,80 metros, y pesa 130 kilos. Lo más curioso de esta mujer es la forma en que se gana la vida: se dedica a aplastar a sus clientes.

Muchos hombres la contratan para acomodar sus huesos o simplemente para llevar adelante alguna fantasía oculta, aunque ella no se involucra íntimamente con ellos.

“Muchos de mis clientes se excitan con mis sesiones de aplastamiento, pero yo no les doy oportunidad de algo más”, asegura Amanda, al tiempo que aclara: “En lo que se trata de trabajo fetiche, soy una mojigata”.

Sergio Miranda es uno de sus clientes más fieles, y es el protagonista del video que se observa en esta nota. El hombre es de Nueva Jersey y afirma que siempre ha tenido una obsesión por las mujeres grandes.

Actualmente asentada en Las Vegas, Amanda cuenta con una extensa lista de clientes, además de una gran cantidad de fans en redes sociales: Solo en Twitter tiene 6 mil seguidores. Además, ha viajado por distintos partes del mundo para complacer a hombres que pedían ser aplastados.