La empresa de juguetes Cuddle Clones se dedica a inventar réplicas de peluche personalizadas de mascotas, en base a las imágenes que mandan sus clientes.

La fundadora de la compañía, Jennifer Graham, tuvo la idea de inventar estos peluches personalizados cuando falleció su perro danés, Rufus, en 2009. Ella pensó que sería una gran idea conmemorarlo con un peluche que sea idéntico a él. La réplica fue tan buena que sus amigos comenzaron a pedirles para sus propias mascotas.

Fue así que Cuddle Clones, con base en Kentucky, Estados Unidos, abrió sus puertas en 2011 y desde entonces no ha parado de “clonar” perros, gatos, caballos, cerditos y hasta incluso arañas.

En tan solo tres años los pedidos fueron aumentando de manera significativa, gracias al éxito de las fotos que publican los clientes a través de las redes, donde muestran a sus mascotas junto a su “clon”.