El hombre estaba enamoradísimo de su mujer y decidió tatuarse su rostro. Sea como sea, no pensó en el momento que podía llegar a separarse. Tiempo después sucedió y él tuvo que "arreglar" el tattoo.

El hombre, que vive en California, tuvo que evaluar si someterse al láser y borrarse el tatuaje o taparlo. Optó por la segunda y decidió elegir un demonio, según informa The Daily Mail.

La imagen recibió más de 4.5 millones de visualizaciones en las redes sociales.

Siempre es una mala idea tatuarte la cara de tu pareja