Nada más y nada menos que 45 minutos fue lo que tardaron varios policías en darse cuenta que en realidad estaban frente a un tigre de peluche, y no un verdadero felino.

Todo comenzó cuando el granjero escocés Bruce Grubb alertó a las autoridades después de notar "al tigre". Inmediatamente se movilizaron seis patrulleros y un equipo de respuesta armada ante lo problemático y peligroso de la situación. 

Durante una tensa espera de 45 minutos, los agentes permanecieron dentro de sus vehículos debatiendo y pensando cómo atrapar al animal que se veía impasible a la distancia.

Finalmente el propio granjero fue quien empezó a dudar ante la inmovilidad de la gran bestia y ahí fue que, cuando se acercó en su camión, descubrió que se trataba de ¡un peluche!  

"Me llevé el susto de mi vida", dijo Grubb y agregó: "Estaba de servicio porque las vacas podían dar a luz en cualquier momento; encendí mi linterna y lo vi allí sentado".

La policía local decidió tomar con humor el suceso y contó los hechos en su cuenta de Facebook, aunque todavía es un misterio cómo llegó ese enorme peluche a la granja.