Dede Koswara, de 42 años, sufría de una extraña enfermedad llamada Epidermodisplasia verruciforme de Lutz-Lewandowsky, que causa el crecimiento de verrugas enormes que se asemejan a la corteza de un árbol, lo que le hizo ganar el apodo de “El hombre árbol”.

Debido a que no podía trabajar ni proveer a su familia, esta condición fue la causa por la que su esposa e hijos lo abandonaron. La batalla de Dede contra esta enfermedad fue tan severa que se creía que solo las verrugas pesaban alrededor de 9 kilos.

El hombre se sometió a una cirugía para remover las verrugas en el año 2008, pero estas siguieron creciendo aún más que antes, por lo que Dede necesitaba al menos dos cirugías al año.

Las personas que lo conocieron resaltaron que Dede nunca se dio por vencido en su búsqueda por una cura para su enfermedad.

“Dede quería recuperarse, a pesar de lo grave de su enfermedad. Estaba luchando contra ella, aunque algunas personas lo despreciaban porque decían que estaba maldito. Estaba aburrido, pasaba el día en una cama en el hospital y fumaba mucho para pasar el rato. Quería volver a trabajar como carpintero y empezar su propio negocio. Tampoco se rindió nunca en su búsqueda por el amor verdadero y una vez dijo: ‘Lo primero que quiero es mejorarme y encontrar un trabajo. Un día, ¿quién sabe? Tal vez conozca a alguna chica y me case con ella’”, contó su enfermera.

Los doctores dicen que Dede murió debido a una serie de complicaciones, incluyendo trastornos del hígado y hepatitis.