El yihadista australiano en Medio Oriente que exhibe cabezas humanas como trofeos de guerra, se hizo famoso en las redes sociales e Internet.

Más allá de su llamativa decisión de comenzar a formar parte del ejército de rebeldes de Medio Oriente, el australiano se hizo conocido por su crueldad sin límites.

EL grupo armado al cual se unió (Estado Islámico - EI) opera sobre todo en Siria e Irak, donde intentan llevar adelante la conformación de un sólo estado islámico en Oriente Medio y Próximo.

Khaled Sharrouf, otro australiano que viajó junto a Elomar, subió las crudas fotografías a su cuenta de Twitter, para ganarse el respeto de sus jefes.

Ambos occidentales volaron juntos hacia Oriente en diciembre de 2013 para unirse al grupo terrorista, según consignó el diario The Australian.