El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ) denunció que el número de periodistas que continúan privados de su libertad en Siria, asciende a 20.

La mayoría de ellos están manos de los yihadistas del Estado Islámico, mientras que contabilizaron 69 trabajadores de prensa muertos desde que comenzó la guerra civil en 2011.

"El brutal asesinato del periodista James Foley, secuestrado en Siria y retenido por casi dos años, es repudiado por toda la gente decente. Nuestros corazones están con su familia, que se ha dedicado a buscarlo para liberarlo", afirmó la vocera del CPJ.

Según la agencia Russia Today, en el video al cual se hace referencia, el periodista estadounidense James Foley envió un mensaje contundente, llamando al alzamiento contra el Gobierno de EEUU, integrado, a su juicio, por sus verdaderos asesinos.

Foley trabajaba para la agencia AFP y la compañía mediática GlobalPost, y fue secuestrado en noviembre del 2012 en el norte de Siria.

El ministro británico de Asuntos Exteriores, Philip Hammond, declaró este miércoles que el encapuchado que aparece en el video habla con acento británico: "Sin duda, en principio eso es lo que parece y obviamente queremos investigarlo a fondo", dijo en la cadena BBC.

El responsable de la diplomacia británica calificó la grabación como "un terrible ejemplo de la brutalidad" del Estado Islámico y alertó de la amenaza que representa el "significativo número" de británicos que operan en Siria e Irak, junto a los yihadistas.

El CPJ reclama que, en todo el mundo, hay 39 casos documentados de periodistas que continúan desaparecidos, aunque se estima que el número es mayor.

Hablando de cifras históricas, la ONG informó que los periodistas fallecidos desde 1992 son 1070, al tiempo que localizó 165 de estas muertes en Irak, 76 en Filipinas, 69 en Siria, 60 en Argelia, 56 en Rusia, 54 en Pakistán, 53 en Somalia y 45 en Colombia.

Según la información que divulgó la ONG estadounidense, en lo que va del año, han sido asesinados 30 trabajadores de prensa. Las víctimas más recientes fueron en Gaza y Ucrania.

El verdugo de Foley sería un terrorista británico

El periódico inglés The Guardian citó "fuentes directas" para averiguar que el extremista se hace llamar John y es sospechado de haber participado en combates contra el régimen de Bashar Al Assad, desde Londres.

Este británico sería el líder de un grupo de tres yihadistas ingleses, que tiene como misión secuestrar y mantener en cautiverio a extranjeros en Raqqa, territorio sirio.

"Lo que está ocurriendo en Irak y Siria es un veneno, un cáncer y podría extenderse a otras partes de la comunidad internacional y afectarnos directamente", puntualizó el jefe del Foreign Office.