Tras reconocer como perdidas para el gobierno central de Kiev dos importantes regiones del país, el presidente interino Alesandr Turchinov decretó el "estado de alerta total" de las fuerzas armadas ucranianas a fin de "impedir que el terrorismo se extienda de las regiones de Donetsk y Lugansk a otras regiones", según anunció el propio mandatario.

Además, la decisión se tomó a partir de "la amenaza de Rusia", que desplegó unos 40 hombres en la frontera común, de invadir el país. "Nuestras fuerzas armadas están en un estado de alerta total. La amenaza de Rusia de comenzar una guerra contra el territorio de Ucrania es real", dijo el presidente ucranio.

"Nuestro primer objetivo es impedir que el terrorismo se extienda de las regiones de Donetsk y de Lugansk a otras regiones", dijo Turchinov, añadiendo que "hemos decidido ya crear milicias territoriales compuestas de voluntarios en cada región".

Moscú, en tanto, negó que Rusia pretenda avanzar sobre territorio ucranio. De hecho, el canciller ruso, Serguei Lavrov, demandó un "diálogo directo" entre el gobierno de Ucrania y los rebeldes del sureste que, como Donetsk y Lugans, ya se encuentran bajo el poder de separatistas prorrusos.

"Lo más importante para Rusia, Estados Unidos y Europa es apoyar un diálogo directo", subrayó Lavrov, quien se encuentra en Santiago de Chile, donde se reunió con el canciller chileno, Heraldo Muñoz, en el marco de una gira por América Latina en la que también reforzó lazos con Cuba y Nicaragua.