Los ataques ocurrieron este domingo en la playa de Oak Island, una localidad turística de Carolina del Norte en aguas del Atlántico, con una escena que según comentaron los testigos "fue similar a la de la película".

Tres jóvenes sufrieron un feroz ataque. Una nena de 12 años y un joven de 16 perdieron un brazo, luego de tener que ser amputados en el hospital local por la terrible mordida.

Ambos jóvenes tuvieron que ser atendidos en la playa después de los ataques, que se dieron con 90 minutos de diferencia uno del otro.

Los especialistas comentaron que podría tratarse de un tiburón 'punta negra', un animal muy rápido y ágil, que puede llegar a medir entre un metro y un metro y medio de longitud.

Hubo una tercera mordida, a una chica de 13 años, que pudo escapar con una mordida en el pie, aunque en su caso la herida no fue de gran importancia.

Según expresaron, no es una zona donde la gente tenga que preocuparse sobre las mordidas de tiburón, y se trataría de un caso aislado.