Al menos cien muertos dejó la explosión de una estación de servicio de Accra, la capital de Ghana, ocurrida en la noche del miércoles. No obstante, algunas agencias internacionales ya hablan de más de un centenar de víctimas fatales.

Aún se desconoce la causa de la explosión ocurrida sobre Kwame Nkrumah Circle, la mayor intersección de la capital, donde muchas personas se resguardaban de una lluvia torrencial que caía en ese momento; algunas fuentes señalan que el siniestro podría haberse debido, justamente, a esa lluvia torrencial.

Los equipos de emergencia y los bomberos se desplazaron de inmediato al lugar del suceso, para auxiliar a las víctimas y para sofocar el incendio que también afectó a numerosos edificios de la zona.