La alarma se encendió cuando Turkish Airlines informó que el vuelo TK 15 de la aerolínea turca, que había partido desde Estambul hacia Buenos Aires, con escala en San Pablo -Brasil- había sido declarado en emergencia por una amenaza de bomba, por lo que los pilotos se vieron obligados a aterrizar a las 14.30 (8.30 de Argentina) en la ciudad marroquí de Casablanca.

"El vuelo TK15 de Turkish Airlines, en viaje desde Estambul a San Pablo con 256 pasajeros a bordo de una nave B777, se desvió hoy al aeropuerto internacional Mohammed V (CMN) en Casablanca, Marruecos, luego de una amenaza de bomba", había enunciado un comunicado oficial.

El avión Boeing 777-300ER aterrizó luego de que se encontrara una nota en el baño de la nave advirtiendo sobre la existencia de una "bomba", por lo que las autoridades decidieron realizar el aterrizaje en la mencionada ciudad marroquí.

"La investigación necesaria fue culminada y podemos confirmar que la amenaza en cuestión no era verídica", informaron desde la aerolínea en las últimas horas.

"Nuestros pasajeros serán recibidos nuevamente a bordo para retomar viaje a Buenos Aires (EZE) tras ejecutar las tareas de limpieza, reabastecimiento y recibir los permisos correspondientes", aseguraron en el escrito.