El papa Francisco nombró como camarlengo al francés Jean Louis Tauran, que sustituye al italiano Tarcisio Bertoe, ex secretario de Estado y que era el cardenal camarlengo desde 2007.
Jean Louis Tauran fue secretario de Estado para las Relaciones con los Estados (una función análoga a la de un ministro de Exteriores) durante el pontificado de Juan Pablo II, mientras que de 2003 a 2007 fue archivista y bibliotecario de la Iglesia Romana y desde 2007 es el presidente del Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso.
Como cardenal protodiácono fue el encargado el 13 de marzo de 2013 de anunciar desde la basílica de San Pedro la elección del papa Francisco.
Cuando fallece o renuncia un Papa, el gobierno provisional de la Iglesia católica pasa a manos del cardenal camarlengo, que debe administrar los bienes de la Santa Sede, junto a un equipo de tres purpurados asistentes.
En caso de deceso, es quien se encarga de confirmar -una vez informado por el prefecto de la Casa Pontificia- de la muerte del Papa y de firmar el acta del deceso.
Para los casos de renuncia, como fue el caso del francés Benedicto XVI, de nombre secular Joseph Aloisius Ratzinger, debe tomar posesión del Palacio Apostólico Vaticano y de los palacios Lateranense y de Castel Gandolfo.
Cuando el Papa muere o renuncia cesan de sus cargos todos los jefes de los consejos pontificios e incluso el secretario de Estado. Sólo permanecen el camarlengo, el penitenciario mayor y el vicario para Roma.

El papa Francisco nombró como camarlengo al francés Jean Louis Tauran, que sustituye al italiano Tarcisio Bertoe, ex secretario de Estado y que era el cardenal camarlengo desde 2007.

Jean Louis Tauran fue secretario de Estado para las Relaciones con los Estados (una función análoga a la de un ministro de Exteriores) durante el pontificado de Juan Pablo II, mientras que de 2003 a 2007 fue archivista y bibliotecario de la Iglesia Romana y desde 2007 es el presidente del Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso.

Como cardenal protodiácono fue el encargado el 13 de marzo de 2013 de anunciar desde la basílica de San Pedro la elección del papa Francisco.

Cuando fallece o renuncia un Papa, el gobierno provisional de la Iglesia católica pasa a manos del cardenal camarlengo, que debe administrar los bienes de la Santa Sede, junto a un equipo de tres purpurados asistentes.

En caso de deceso, es quien se encarga de confirmar -una vez informado por el prefecto de la Casa Pontificia- de la muerte del Papa y de firmar el acta del deceso.

Para los casos de renuncia, como fue el caso del francés Benedicto XVI, de nombre secular Joseph Aloisius Ratzinger, debe tomar posesión del Palacio Apostólico Vaticano y de los palacios Lateranense y de Castel Gandolfo.

Cuando el Papa muere o renuncia cesan de sus cargos todos los jefes de los consejos pontificios e incluso el secretario de Estado. Sólo permanecen el camarlengo, el penitenciario mayor y el vicario para Roma.