Durante las últimas semanas vivimos una resistida y hostil bienvenida por parte de los líderes políticos a la llegada de cientos de miles de inmigrantes sirios que huyen de la cruda guerra civil que azota a toda la región.
Cierres de estaciones, prohibiciones, hasta matanzas por parte de civiles, fueron noticia en todos los medios de comunicación mundiales, hasta llegar a la foto del niño sirio muerto en una playa que causó conmoción internacional.
Esta semana se vio un tono diferente en los discursos de algunos jefes de estado europeos. Entre ellos, François Hollande, quien afirmó que "Francia acogerá a 24 mil refugiados en los próximos dos años". Noticia que está dando la vuelta al globo.
En el mismo discurso, Hollande anunció que Francia recibirá "a su cuota" de refugiados, pero que la Unión Europea deberá hacerse cargo de distribuir el resto de los inmigrantes que lleguen a Europa.
Para terminar, el mandatario francés informó que dio luz verde al Ejército para que realice eventuales ataques aéreos sobre objetivos del Estado Islámico en Siria, con el objetivo de frenar el éxodo de indocumentados.
Algo parecido sucedió con Alemania, país que desde un primer momento se mostró contrario a la llegada de inmigrantes sirios, y que ahora anuncia una ayuda de 6.000 millones de euros para los refugiados.
La mismísima Ángela Merkel realizó el anuncio, en el que dio a conocer que se destinarán 3.000 millones de euros adicionales al presupuesto federal de 2016: "Lo que estamos viviendo ahora es algo que nos va a tener ocupados en los próximos años y que va a cambiar nuestro país. Queremos que el cambio sea positivo", expresó.
Los números son confusos. Todo indica que las cifras que manejan los líderes europeos no se condicen con la realidad, y habrá que ver cuál será la verdadera situación para todos aquellos que están fuera de ese "conteo".
Solo durante este último fin de semana, más de 20 mil refugiados llegaron a Alemania, solo 2.500 alcanzarán Múnich este lunes y todavía cientos permanecen en Hungría esperando un medio de transporte, que nunca llega.
En las últimas horas se dio a conocer otro atentado por parte de civiles contra inmigrantes. Un incendio intencional se desató en un centro de asistencia a los refugiados sirios en Rotemburgo. Por suerte no se lamentaron víctimas, pero sí hubieron al menos cinco heridos.
En conclusión, las cifras que se manejan en los medios de comunicación hablan de 120 mil refugiados. Según las informaciones, Alemania, Francia e Italia deberían hacerse cargo del 59% del total de las personas, pero este último país afirmó que se ve incapacitado para cumplir las reglas del llamado 'Protocolo de Dublín'.
Pero desde el comienzo de este año, la cifra de refugiados que han llegado a Europa casi que duplica estas cifras "oficiales". Viendo la película completa, cualquiera puede estimar que la llegada de sirios al viejo continente está muy por encima de los 120 mil que se hablan y que se dividen en diferentes países.
Por otro lado, la posición de España es una incógnita, Grecia se muestra austera, Polonia, la República Checa, Eslovaquia y Hungría rechazan que esas cuotas sean obligatorias, y como era de esperarse, Gran Bretaña se promueve excenta a recibir inmigrantes.
Según los porcentajes destinados a cada país, siempre suponiendo que el número total es de 120 mil refugiados, el 'reparto' general quedaría de la siguiente manera.

Durante las últimas semanas vimos una resistida y hostil bienvenida por parte de los líderes políticos europeos a la llegada de cientos de miles de inmigrantes sirios que huyen de la cruda guerra civil que azota a su región.

Cierres de estaciones, prohibiciones, hasta matanzas por parte de civiles fueron noticia en todos los medios de comunicación mundiales, hasta llegar a la foto del niño sirio muerto en una playa que causó conmoción internacional.

Casualmente, esta semana se notó un tono diferente en los discursos de algunos jefes de estado europeos. Entre ellos, François Hollande, quien afirmó que "Francia acogerá a 24 mil refugiados en los próximos dos años", noticia que está dando la vuelta al globo.

En el mismo discurso, Hollande anunció que Francia recibirá "a su cuota" de refugiados, pero que la Unión Europea deberá hacerse cargo de distribuir el resto de los inmigrantes que lleguen a Europa.

Para terminar, el mandatario francés sostuvo que ya dio luz verde al Ejército para que realice eventuales ataques aéreos sobre objetivos del Estado Islámico en Siria, con el objetivo de frenar el éxodo de indocumentados.

Algo parecido sucedió con Alemania, país que desde un primer momento se mostró contrario a la llegada de inmigrantes sirios, y que ahora anuncia una ayuda de 6.000 millones de euros para los refugiados.

La mismísima Ángela Merkel realizó el anuncio, en el que dio a conocer que se destinarán 3.000 millones de euros adicionales al presupuesto federal de 2016: "Lo que estamos viviendo ahora es algo que nos va a tener ocupados en los próximos años y que va a cambiar nuestro país. Queremos que el cambio sea positivo", expresó llamativamente.

Los números son confusos. Todo indica que las cifras que manejan los líderes europeos no se condicen con la realidad, y habrá que ver cuál será la verdadera situación para todos aquellos que están fuera de ese "conteo".

Solo durante este último fin de semana, más de 20 mil refugiados llegaron a Alemania, solo 2.500 alcanzarán Múnich este lunes y todavía cientos permanecen en Hungría esperando un medio de transporte, que nunca llega.

En las últimas horas se perpetró otro atentado por parte de civiles contra inmigrantes: un incendio intencional se desató en un centro de asistencia a los refugiados sirios en Rotemburgo. Por suerte no se lamentaron víctimas, pero sí hubieron al menos cinco heridos.

En conclusión, las cifras que se manejan en los medios de comunicación hablan de 120 mil refugiados. Según las informaciones, Alemania, Francia e Italia deberían hacerse cargo del 59% del total de las personas, pero este último país afirmó que se ve incapacitado para cumplir las reglas del llamado 'Protocolo de Dublín'.

Desde el comienzo de este año, la cifra de refugiados que han llegado a Europa casi que duplica estas cifras "oficiales". Viendo la película completa, cualquiera puede estimar que la llegada de sirios al viejo continente está muy por encima de los 120 mil que se hablan y que se dividen en diferentes países.

Por otro lado, la posición de España es una incógnita, Grecia se muestra austera; Polonia, la República Checa, Eslovaquia y Hungría rechazan que esas cuotas sean obligatorias, y como era de esperarse, Gran Bretaña se proclama exenta a recibir inmigrantes.

Según los porcentajes destinados a cada país, siempre suponiendo que el número total es de 120 mil refugiados, el 'reparto' general quedaría de la siguiente manera.

Polonia 7,7% (9.287)

Holanda 6,0% (7.214)

Rumanía 3,9% (4.646)

Bélgica 3,8% (4.564)

Suecia 3,7% (4.469)

Austria 3,0% (3.640)

Portugal 2,6% (3.074)

la República Checa 2,5% (2.978)

Finlandia 2,0% (2.398)

Bulgaria 1,3% (1.600)

Eslovaquia 1,3% (1.502)

Croacia 0,9% (1.064)

Lituania 0,7% (780)

Eslovenia 0,5% (631)

Letonia 0,4% (526)

Luxemburgo 0,4% (440)

Estonia 0,3% (373)

Chipre 0,2% (274)

Malta 0,1% (133)