Un hecho insólito que parecía aislado y que ahora se convirtió en patrón fue lo que llevó a la Fiscalía de Ginebra a iniciar una investigación sobre el curioso caso de inodoros tapados con billetes de 500 euros triturados. 

El primer hecho ocurrió en uno de los baños del banco UBS, en el centro de la ciudad, y para las autoridades fue toda una sorpresa; en especial cuando vieron que el suceso se repitió en los retretes de varios restaurantes cercanos.

El diario local Tribune de Genève dio cuenta de esta insólita rotura de billetes y señaló que el suceso podría estar relacionado por el cambio de legislación bancaria que entró en vigor en 2017. A partir del año que viene, Suiza deberá intercambiar información sobre depósitos con la Unión Europea, algo que no era obligatorio hasta ahora. 

Tal vez alguna persona necesite "deshacerse" de los billetes y tomó la extraña decisión de hacerlo en inodoros.  Un portavoz de la Fiscalía de Ginebra, Vincent Derouand, destacó que “probablemente los billetes fueron cortados con tijeras”. Por el momento, se sospecha de dos mujeres españolas que tenían una importante suma en una caja de seguridad.

La destrucción de moneda no es delito en Suiza, aunque claramente este acto irracional da cuenta de una persona- o varias- que necesitan eliminar sus activos.