"¿Qué es lo más importante? ¿El arte o el derecho a una alimentación sana y duradera? Nuestro sistema agrícola está enfermo", gritó una de las dos activistas que arrojaron una sopa de color naranja sobre la obra de Leonardo da Vinci.

Después de vandalizar “La Gioconda”, pasaron por debajo de las barreras que rodean el cuadro, una secuencia que duró casi dos minutos y fue filmada por las cámaras de seguridad.

Después de atribuirse el accionar de las mujeres de 24 y 63 años, la organización Riposte Alimentaire, aseguró que su “acción no violenta exigen el establecimiento de una Seguridad Social Alimentaria Sostenible”.

Además, Riposte alimentaire denuncia que en Francia “una de cada tres personas se salta las comidas por falta de medios” mientras que “al mismo tiempo, se desecha el 20% de los alimentos producidos”.