El arzobispo y jefe de la Arquidiócesis de la ciudad de San Luis, en Missouri (EE.UU.), sorprendió al mundo con unas declaraciones increíbles en el juicio que lo tiene como acusado por abuso de menores.

Ante el juez, el religioso llamado Robert Carlson, dijo: "No estoy seguro de si yo sabía que se trataba de un crimen o no", aunque luego admitió que "ahora sí" sabía de la gravedad del asunto.

El religioso estuvo en el centro de las noticias desde el año pasado, apuntado no solo por casos de abuso sino también por encubrir a otros pederastas.

El diario local 'St. Louis Post-Dispatch' marcó de incoherente la declaración del arzobispo, ya que en 1984 firmó un memorando en el que se discutía la ley de prescripción para las demandas relacionadas con acusaciones de abusos sexuales.

Durante el juicio, el arzobispo, en 193 ocasiones, dijo que no podía recordar con precisión las respuestas a las preguntas que se le hacían.

El juicio por pederastia involucra a la diócesis estadounidense de Saint Paul y Mineápolis y Winona, Minnesota, a raíz de un abuso sexual perpetrado en los '70, por un sacerdote contra un niño que recién ahora de adulto decidió llevarlo a los tribunales.