Desde el 19 de noviembre, las autoridades chilenas comenzaron a registrar un incremento en la sismicidad del volcán Copahue, además de un aumento en la actividad superficial a nivel del cráter, con pequeñas explosiones acompañadas de emisión de cenizas e incandescencia.

Tanto la Oficina Nacional de Emergencias (Onemi) como el Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) de Chile informaron que podrían continuar ocurriendo explosiones menores a nivel del cráter.

Por esa razón, los organismos reiteraron "la recomendación de exclusión de 1,5 km alrededor del cráter El Agrio por ser considerada zona de alto riesgo y se mantiene el nivel de alerta técnica en amarillo, situación que permanece vigente desde el 03 de junio del año 2013".